LONDRES, 6 oct (Thomson Reuters Foundation) -
La mayoría de las naciones donantes más ricas del mundo incumplieron sus promesas de ayuda al desarrollo en 2013 y sólo un tercio del dinero fue a los países más pobres, según un informe difundido el lunes.
Los aportes de los miembros del Comité de Ayuda al Desarrollo (CAD) de la OCDE crecieron un 5,3 por ciento interanual a un récord de 131.200 millones de dólares en 2013 tras dos años consecutivos de declive, dijo The One Campaign en un informe de datos anuales de ayuda.
Sólo un tercio fue a los países menos desarrollados, la mayoría de los cuales están en el África subsahariana, pese al alto nivel de apoyo al nuevo objetivo de que el 50 por ciento de toda la ayuda vaya a las naciones más pobres, dijo ONE, cofundada por el músico irlandés Bono para acabar con la pobreza extrema.
Mientras los líderes mundiales se preparan para pactar una serie de objetivos de desarrollo el año próximo, ONE instó tanto a países ricos como pobres a abordar la escasez de ayuda para garantizar que los más necesitados sean los protagonistas de una nueva iniciativa mundial contra la pobreza a partir de 2015.
"Si los donantes no dan un paso al frente y destinan al menos la mitad de su ayuda a esos países que la necesitan más, existe el peligro de que los más pobres del mundo se queden detrás", dijo Sara Harcourt, director de política en ONE y uno de los autores del informe, a Thomson Reuters Foundation.
Diecisiete de los 28 miembros del CAD aumentaron su ayuda al desarrollo en el extranjero (ODA, por sus siglas en inglés), pero pese a estos incrementos la ayuda representaba un 0,29 por ciento de la riqueza nacional, por debajo del 0,7 por ciento del objetivo de las Naciones Unidas.
Reino Unido se convirtió en el primer país del Grupo de las Siete naciones más industrializadas en cumplir el objetivo el año pasado, ayudado por un incremento de 3.950 millones a su presupuesto de ayuda al desarrollo.
Japón, Alemania y Noruega también redoblaron sus esfuerzos, pero otros como Francia, Canadá y Australia, tradicionalmente en la primera línea en este área, mostraron declives significativos en sus presupuestos de ayuda en medio de recortes generalizados en el gasto público, al igual que Holanda.
Estados Unidos, el mayor donante bilateral del mundo, tuvo un desarrollo pobre con otros estados del G7 en términos de gasto en ayuda comparado con la riqueza nacional, con un ratio del 0,19 por ciento.
Los gobiernos africanos también están fallando a la hora de priorizar el gasto en programas para reforzar la lucha contra la pobreza extrema, dijo ONE.
Sólo seis de los 43 países subsaharianos cumplieron sus objetivos de gasto en salud, y sólo ocho con sus objetivos en agricultura, según el informe.