MADRID 21 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Alianza Europea de Operadores Locales de Fibra Óptica (ELFA), integrada por unas 800 empresas y asociaciones, han trasladado su rechazo a las potenciales "iniciativas políticamente forzadas para promover la consolidación transfronteriza de los mercados de telecomunicaciones" para fomentar la creación de grandes corporaciones en Europa con la escala suficiente para competir con los gigantes del sector de Estados Unidos y China.
ELFA cree que la escala "puede ser una necesidad para que las empresas atraigan capital de inversión, cumplan los crecientes requisitos normativos y estén financieramente equipadas para realizar las continuas actualizaciones tecnológicas de las redes de comunicaciones electrónicas", sin embargo, no considera que "las iniciativas políticamente forzadas para promover la consolidación transfronteriza sean la forma correcta de avanzar".
La organización europea también ha argumentado que la existencia de múltiples actores es una "garantía de un despliegue de redes rápido y eficiente" y, de hecho, ha destacado que los operadores de ELFA son los responsables de la construcción de "más del 50% de las redes de fibra locales y regionales en áreas urbanas y rurales de toda Europa".
Además, ha defendido que forzar la concentración del mercado conduce, a su juicio, "a una menor inversión, menor innovación y bienestar de los consumidores" en términos de oferta y precios.
En su opinión, "se deben apoyar las estructuras de propiedad diversificadas y la inversión local en lugar de fomentar la consolidación transfronteriza a gran escala".
ELFA también considera que "el mercado europeo de las telecomunicaciones ya es competitivo y funciona bien" y aboga porque las cuestiones de consolidación transfronteriza se traten "en términos de mercado y dentro del marco existente de la legislación nacional y europea antimonopolio y de competencia".
A ello se suma la petición de un marco regulatorio predecible para atraer inversiones y permitir una competencia leal y también la advertencia sobre la dificultad de la integración de los mercados, dado que cada uno de los 27 países de la Unión Europea presenta realidades "muy diferentes en cuanto a demanda, consumo, modelos de negocio y cobertura de redes de muy alta capacidad".