(Agrega comunicado de Cancillería argentina, detalles de la audiencia y de mercado)
Por Joseph Ax y Nate Raymond
NUEVA YORK, 29 sep, 30 (Reuters/EP)
- Un juez de distrito en Manhattan declaró el lunes a Argentina en desacato, bajo el argumento de que violó una orden judicial que obligaba al país a pagar más de 1.330 millones de dólares a fondos de cobertura por su default de deuda hace más de una década.
Tras la audiencia con el juez estadounidense Thomas Griesa, el Gobierno argentino sostuvo que el fallo es "violatorio del derecho internacional".
"El problema es que la República Argentina ha estado y está tomando medidas para intentar eludir partes decisivas (de la sentencia)", señaló Griesa en una audiencia en Nueva York, en la que participaron abogados de la nación austral y de sus acreedores conocidos como "holdouts".
El magistrado consideró que una ley aprobada por Argentina para canjear bonos externos por otros con domicilio local es "ilegal" porque busca violar una sentencia suya que impide al país realizar pagos de deuda en tanto no compense al mismo tiempo a acreedores impagos que la demandaron en Estados Unidos.
"Las medidas propuestas son ilegales y no pueden llevarse a cabo", dijo Griesa, levantando la voz durante la audiencia en Manhattan.
Griesa ya había bloqueado en junio pasado un pago de deuda reestructurada de Argentina, lo que empujó al país a un nuevo default a fines de julio.
El juez convocó a la audiencia del lunes luego de que los fondos que demandaron a Argentina -liderados por NML Capital Ltd, de Elliott Management Corp, y Aurelius Capital Management- le pidieron declarar al país en desacato e imponer una multa de 50.000 dólares por cada día que pase sin que se cumpla su orden.
Los fondos, a los que Argentina llama "buitres", también habían pedido a Griesa que aplicara "sanciones no monetarias" a la nación sudamericana. Pero el juez no dio detalles sobre las consecuencias de la orden de desacato y dijo que las implicancias se definirán en sesiones futuras.
Las multas pecuniarias contra un país son casi imposibles de hacer cumplir, ya que los activos de otras naciones que se hallan dentro de Estados Unidos suelen estar protegidos contra embargos por la Ley de Inmunidad de Soberanía Extranjera.
"La decisión del juez Griesa no tiene ningún efecto práctico salvo proveer de nuevos elementos que sirvan a la difamante campaña política y mediática llevada adelante por los 'fondos buitre' contra la Argentina", dijo la Cancillería de la nación austral en un comunicado.
"El Gobierno argentino reafirma su decisión de seguir ejerciendo la defensa de la soberanía nacional y de solicitar al Gobierno de los Estados Unidos de América que acepte la jurisdicción de la Corte Internacional de Justicia para dirimir esta controversia entre ambos países", sostuvo.
El mercado argentino no reaccionó de inmediato a la decisión de Griesa ya que su fallo se conoció cerca del cierre de las operaciones financieras.
CARTA A KERRY
Durante la audiencia, Carmine Boccuzzi, uno de los abogados de Argentina, había afirmado que una orden de desacato sólo "empeoraría las cosas".
La administración de la presidenta Cristina Fernández se ha negado a obedecer un fallo de la justicia de Estados Unidos que ordena el pago de toda la deuda que mantiene con acreedores que no aceptaron los canjes que Argentina lanzó en 2005 y 2010 para salir del multimillonario default declarado en 2002.
"Es total y absolutamente inconcebible que los litigantes hayan considerado que un juez local pueda declarar a un Estado extranjero 'en desacato'", señaló el lunes el Gobierno de Argentina en una carta dirigida al secretario de Estado estadounidense, John Kerry.
El viernes, Griesa autorizó a Citigroup Inc a procesar a fin de mes un pago de intereses por 5 millones de dólares sobre títulos de deuda denominados en dólares y emitidos bajo ley argentina que vencen el 30 de septiembre.
Una fuente del Banco Central de Argentina dijo a Reuters que el Gobierno depositará el martes el vencimiento de renta de los bonos "Par" en la nueva cuenta habilitada en Nación Fideicomiso, como estipula la flamante ley de pago soberano que busca evitar embargos de la justicia estadounidense.
El depósito, con el que por primera vez se reemplazará al Bank of New York Mellon como agente de pago, será de unos 200 millones de dólares.
La deuda que Griesa ordenó cancelar a Argentina es de 1.330 millones de dólares más intereses, pero funcionarios del país austral advirtieron que, en caso de obedecer y pagarla, la nación podría sufrir nuevos litigios multimillonarios.