Publicado 11/03/2025 18:09

Rafa Nadal: "Después de los Juegos volví a casa y me dije: 'Ok, hasta aquí'"

Archivo - Rafael Nadal of Spain during the tribute to his career in his farewell to professional tennis during the Davis Cup 2024 at Martin Carpena Pavilion on November 19, 2024, in Malaga, Spain
Archivo - Rafael Nadal of Spain during the tribute to his career in his farewell to professional tennis during the Davis Cup 2024 at Martin Carpena Pavilion on November 19, 2024, in Malaga, Spain - Oscar J. Barroso / AFP7 / Europa Press - Archivo

   MADRID, 11 Mar. (EUROPA PRESS) -

   El extenista español Rafa Nadal reconoce que fue después de los Juegos Olímpicos de París cuando se dijo "hasta aquí" y decidió su retirada, aunque tenía esperanzas de haber podido alargar más su carrera tras su lesión en el Abierto de Australia de 2023, momento en el que decidió "seguir luchando" porque tres meses antes se veía como "uno de los mejores del mundo".

   "Después de los Juegos Olímpicos volví a casa y me dije: 'Ok, ya está, hasta aquí'. Lo sentí, antes lo sentía, pero quería darme tiempo. Pero después de ese momento pensé que no tenía sentido jugar más. Sentía que, con este problema no iba a volver a ser competitivo al nivel que me motiva. Entonces, cuando sentí eso, para mí, se acabó", afirmó Rafa Nadal en una entrevista en el podcast 'Serve' con el extenista estadounidense Andy Roddick.

   El balear confesó que con la lesión sufrida en el Abierto de Australia de 2023 llegó un punto en que decidieron pasar por el quirófano porque, después de hablar con diferentes médicos especialistas en esa área, estos decían que si quería seguir jugando en el circuito, "era la única manera". "Me dijeron que creían que iba a poder volver", agregó.

   El manacorí apuntó que en ese momento tuvo "algunas dudas" porque tenía ya 37 años y "quizás era el momento de dejarlo", pero que aun así lo aceptó. "Decidí seguir luchando porque, de alguna manera, tres meses antes, estaba siendo uno de los mejores del mundo y, al mismo tiempo, estaba disfrutando de lo que estaba haciendo. Así que lo intenté", añadió.

   "Después de la operación las cosas fueron más o menos bien. El problema es que todavía tenía la sensación de que no podía apretar, sentí algunas limitaciones en esa área, aunque no sentí que perdiera velocidad de bola, solo que necesitaba recuperar la confianza física. Por eso, durante todos estos meses, ha sido difícil porque, de alguna manera, me sentí que debía continuar peleando porque, en algún punto, tal vez eso iba a funcionar bien", recalcó.

   El 14 veces ganador de Roland Garros explicó que tras la lesión en el psoas pudo competir, pero no podía "competir al nivel que quería" por diferentes razones. "No jugaba lo suficientemente bien y dentro de mí sabía que no era capaz porque no podía moverme de la forma que acostumbraba a moverme", subrayó.

   Sobre el momento en el que portó la antorcha olímpica en la ceremonia de los Juegos de París, Nadal reconoció que nunca va a poder "agradecer lo suficiente" que le regalaran ese momento. "Sin ser francés, recibir la antorcha de manos de Zidane enfrente de la Torre Eiffel... Además, me lo dijeron cinco o diez minutos antes, era un supersecreto", apuntó.

   "Yo llegué ahí y no sabía lo que iba a pasar. Cuando llega el momento, me lo van explicando: 'Vas a recoger la antorcha de Zidane'. Estaba nervioso porque no sabía lo que iba a ocurrir. Si ves la imagen, subo por las escaleras al escenario para recoger la antorcha. Justo antes, estuve esperando dos minutos ahí. Cuando me di cuenta del momento, empecé a llorar un poco y entonces me dije: 'Para, es el momento de disfrutar'. Fue increíble", expresó el exnúmero uno del mundo.

   Por otro lado, sobre su rivalidad con el suizo Roger Federer, Nadal considera que fue "más atractiva para los fans" que la que mantuvo con Novak Djokovic por "la cercanía que había", mientras que a nivel deportivo tenía "más clara la estrategia". "Yo intentaba matar su revés todo el rato porque la derecha de Federer es la mejor contra la que he jugado. Era como una partida de ajedrez, todo el mundo sabía lo que iba a ocurrir. Si yo jugaba muy bien, le ganaba, si él jugaba muy bien, me ganaba", dijo.

   "Al inicio de su carrera, creo que cometió un error, que era insistir en un revés con 'spin' hacia mi 'drive' y eso me permitía seguir insistiendo con mi derecha. Luego, en 2017, él dio un paso adelante y empezó a atacar más, sobre todo con su resto de revés. Su saque, también, para mí era muy difícil de leer. El nivel de 2017 es el mejor que le he visto jamás. La sensación que tenía era que estaba en sus manos", manifestó Rafa Nadal sobre sus duelos con el de Basilea.

   Por otro lado, el 22 veces ganado de Grand Slam admite que con Djokovic "todo era diferente". "Podía tener una estrategia, pero al final, tenía que jugar muy bien todo el tiempo. No tenía la misma estrategia que ante Roger. No podía hacerle tanto daño con mi 'drive' a su revés, no tenía esa sensación, tenía que ajustar todo", indicó.

   "Cuando le tiraba al revés, cogía la pelota muy rápido y te ponía en una situación muy difícil. Empecé a usar el cortado contra él, y por eso le jugué más al centro, no le daba ángulos porque si le abrías y no creabas mucho daño, abría mucho la pista. En lo que respecta a control de bola, es el mejor jugador al que me he enfrentado", concluyó.

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