MONTEVIDEO, 24 jun, 25 Jun. (Reuters/EP) -
- La polémica se desató en Uruguay tras la mordida del delantero Luis Suárez a un defensor italiano durante el Mundial, dividiendo las aguas en un país fanático del fútbol entre aquellos aficionados que apoyan al ídolo y quienes se sienten avergonzados.
Pero todos coinciden en algo: la preocupación de que el atacante quede fuera del torneo si la FIFA decide sancionarlo.
En Montevideo, la algarabía de la gente que revoleaba la bandera uruguaya tras el 1-0 ante Italia, que le permitió el martes a los "charrúas" clasificar a octavos de final, se encontró al cierre de la tarde con algunos comentarios en contra de la actitud de Suárez en la cancha.
"Es un problema que tiene el tipo que nos hace quedar mal a todos los uruguayos (...) Este muchacho se ve que no puede controlar el tema de morder y agredir", dijo Luis Lara, un comerciante de 52 años.
Imágenes de televisión mostraron al atacante del Liverpool clavándole los dientes al italiano Giorgio Chiellini en su hombro izquierdo en medio de una entreverada jugada para luego tirarse al piso sujetándose la cara con muestras de dolor.
El miembro del comité ejecutivo de la FIFA Jim Boyce aseguró a Reuters que el organismo debe investigar el incidente y "tomar las acciones disciplinarias que considere necesarias".
Suárez fue sancionado el año pasado en la Liga Premier de Inglaterra con 10 partidos por morder en el brazo al defensa del Chelsea Branislav Ivanovic y en el 2010 había sido suspendido por siete encuentros por morder a Otman Bakkal, del PSV Eindhoven, cuando jugaba para el Ajax.
"No podíamos creer que lo estuviese haciendo de nuevo. Es que nos complica a todos si le dan una sanción con esto, genera un poco de miedo de qué puede pasar ahora", dijo Juan Santestevan, de 33 años.
Pero las voces de apoyo también se hicieron presentes.
"En este partido necesitábamos ganar y sí, si hay que pegar se pega y si hay que morder se muerde. Es la garra 'charrúa' y hacemos todo lo posible y clasificamos", dijo Bárbara Giordano, estudiante de abogacía de 26 años.
En las redes sociales proliferaron las imágenes y los comentarios ironizando sobre el suceso.
"No hubo mordida, eso lo dice la prensa para matar a Suárez. (Suárez) se tocaba los dientes por el codazo y las marcas (Chiellini) se las hizo con las uñas. Que te peguen un codazo es peor que una mordidita, es como cualquier otra infracción", opinó Pablo Dilan, impresor gráfico de 38 años.
La victoria ante Italia hizo que los uruguayos olvidaran el mal inicio en el Mundial, con una sorpresiva caída 3-1 ante Costa Rica.
"No me da vergüenza como uruguaya, importa más la victoria de Uruguay", dijo Teresa Mascheroni, una odontóloga de 59 años.