MADRID, 4 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Paris Saint-Germain recibe este miércoles en el Parque de los Príncipes al Liverpool (21.00 horas) en la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones, un duelo entre dos de los grandes favoritos para estar en la final de Múnich en la que los parisinos intentarán aprovechar el factor campo para viajar a Anfield con la eliminatoria a su favor, algo que también desea el Bayern Múnich en el duelo alemán ante el Bayer Leverkusen de Xabi Alonso.
El Parque de los Príncipes albergará el primer envite de una de las eliminatorias estrella de estos octavos de la Champions. PSG y, sobre todo por lo visto durante el año, Liverpool, son candidatos al título y los caprichos del nuevo formato hace que se vean las caras ante de lo previsto, aunque el favoritismo sigue recayendo en el bando 'red'.
Sin embargo, el conjunto parisino que entrena el español Luis Enrique Martínez se encuentra en un gran estado de forma que equilibra mucho más las cosas y anima al campeón francés de cara a sacar ventaja en este encuentro de ida. Y es que, el PSG es uno de los mejores equipos desde que iniciara 2025, con 15 victorias en 16 partidos, concediendo sólo un empate en el encuentro liguero ante el Reims.
Una racha en la que Ousmane Dembélé ha emergido como goleador y gran parte de las opciones en la eliminatoria para los de Luis Enrique pasan por su gran estado de forma, que rivalizará con el de Mohamed Salah en el bando rival. El 'mosquito' es el máximo goleador europeo en el año natural con 18 tantos y el 'pichichi' parisino en la Champions con seis tantos para liderar un frente ofensivo donde también sobresale Bradley Barcola y donde quiere encontrar su sitio K, a los que hay que sumar una asistencia. De hecho, ya es el máximo goleador del equipo en Liga de Campeones con seis goles, seguido de Barcola con tres, mientras que el último refuerzo parisino, Khvicha Kvaratskhelia, quiere hacer valer la apuesta que se hizo por él en el mercado invernal.
Por su parte, el Liverpool quiere demostrar en uno de los campos más complicados de Europa que su candidatura al título de la Liga de Campeones sigue en todo lo alto. Tras una fase liga casi inmaculada y un 2024 brillante, el rendimiento de los 'Reds' ha bajado un poco, aunque sigue manteniéndose líder destacado de una Premier League que tiene en su mano. Sin embargo, en los dos meses de 2025, los de Arne Slot han caído derrotados hasta en tres ocasiones por sólo una derrota en 2024.
Eso sí, en los últimos partidos, el conjunto inglés ha demostrado ante rivales de entidad como Manchester City y Newcastle que el equipo vuelve a tomar la velocidad crucero exhibida al inicio del curso. Además, su enfermería llega prácticamente vacía al duelo del Parque de los Príncipes, por lo que Slot, que tiene la duda de Cody Gakpo, podrá alinear su once de gala con Salah, que ha participado en mínimo un gol en los últimos nueve partidos que ha disputado --nueve goles y cinco asistencias--, a la cabeza.
BAYERN Y BAYER BUSCAN SER EL ORGULLO ALEMÁN Y EL INTER EVITAR SUSTOS
Por su parte, Bayern Múnich y Bayer Leverkusen se enfrentan en el Allianz Arena en el primer duelo de la eliminatoria alemana de los octavos, un partido de ida en el que los bávaros quieren demostrar su superioridad en casa ante un rival que parece tenerles cogida la medida en los últimos años y al que no ganan desde que Xabi Alonso se hizo cargo del equipo.
La ciudad de Múnich y los aficionados del Bayern sueñan con estar presentes en la final que se disputará en la capital bávara el próximo 31 de mayo. Para ello, deberán deshacerse en octavos de final de su gran 'bestia negra' en las últimas temporadas, el Bayer Leverkusen de Xabi Alonso, que ya ha sido capaz de arrebatarle su dominio nacional con una Bundesliga y una Copa Alemana.
Además, desde entonces, los dos 'gigantes' actuales del fútbol alemán se han enfrentado hasta en seis ocasiones, en las que los de Xabi Alonso no han perdido, con tres triunfos y tres empates, entre ellos el último sin goles del pasado mes de febrero en el BayArena donde los locales fueron muy superiores.
Ahora, el que juega en casa es el conjunto muniqués, que quiere aprovechar su mayor experiencia en Champions y el apoyo de su público, frente al que vivió un gran susto en el 'playoff' ante el Celtic FC escocés, para tomar ventaja en una eliminatoria que se antoja igualada hasta el final.
Vital para conseguirlo será que Harry Kane, que atraviesa una racha de cuatro partidos sin marcar, recupere su mejor versión, así como que la defensa del Bayern muestre una mayor concentración y contundencia que las exhibidas en la ronda anterior. Enfrente, el talentoso Florian Wirtz, máximo goleador del Leverkusen en Champions, será una de las principales amenazas de los de Xabi Alonso, que tienen en su juego coral su principal virtud.
Por último, Feyenoord e Inter de Milán abrirán la jornada de Champions de miércoles en De Kuip (18.45 horas) en una eliminatoria que se presenta como una de las más aparentemente desiguales de los octavos de final, y en la que los 'neroazzurri', cuartos en la fase liga, parten con el cartel de favoritos, pero avisados de un equipo neerlandés que dio la sorpresa eliminando a su vecino AC Milán en el 'playoff'.
El equipo de Simone Inzaghi, que viene de empatar en Serie A ante el Nápoles, busca volver a soñar con otra final europea tras la alcanzada hace dos temporadas ante el Manchester City, un camino hasta Múnich que está cimentando desde la defensa. Y es que el equipo italiano es el mejor de la competición en este apartado, y sólo recibió un gol en contra en la fase liga, manteniendo su portería a cero en siete partidos.
Además, a nivel ofensivo, Lautaro Martínez está cuajando una gran Liga de Campeones y ya ha visto puerta hasta en cinco ocasiones en los primeros ocho encuentro, en la que es la mejor cifra goleadora de su carrera en esta competición. La mala noticia para Inzaghi serán las bajas de tres jugadores importantes de su entramado defensivo, el guardameta Yan Sommer, Federico Dimarco y Matteo Darmian, que se perderán el encuentro de ida por lesión.
Por su parte, el Feyenoord, que llega a la eliminatoria plagado de bajas, pero ya con Robin van Persie como técnico, se encomienda a Paixo --autor de un gol ante el Milan-- para ilusionarse con unos cuartos de final que no pisa desde la temporada 1971-72, en la que acabaría eliminado en dicha ronda por el Benfica por un contundente 5-2 en la eliminatoria.