RIO DE JANEIRO, 28 JUN (Notimérica/EP)
"Jesús es el entrenador que más victorias puede darte en la vida". Con frases como ésta alusivas al Mundial de Fútbol decenas de grupos religiosos de todo Brasil están aprovechando los partidos para "evangelizar" a aficionados y turistas extranjeros, sobre todo en las entradas de los estadios y de las zonas de fiesta.
"Nuestra intención no es catequizar a nadie, es llevar un mensaje de amor", ha explicado en declaraciones a Notimérica/EP Kaline de Lima, la coordinadora del Ministerio Joven de Río de Janeiro de la Renovación Carismática Católica, una de las comunidades más activas, que ya han llevado a cabo acciones en las 12 ciudades sede del Mundial bajo el lema 'Jesús en la Copa'.
Acercar la palabra de Dios a los amantes del fútbol no ha sido algo improvisado. La comunidad partía de la experiencia de la Jornada Mundial de la Juventud, que el año pasado congregó a cientos de miles de jóvenes en Río de Janeiro para encontrarse con el Papa Francisco. En aquella ocasión, 2.000 jóvenes formaron parte del programa 'Jesús Litoral', que llevó los textos sagrados a las exuberantes playas cariocas.
En esta ocasión, el trabajo se ha centrado en todas las ciudades sede del Mundial. Los voluntarios se acercan a los aficionados y les cuentan que Dios les ama independientemente de lo que hagan en conversaciones que duran entre uno y tres minutos, asegura De Lima, que confiesa que han tenido que adaptar un poco el mensaje porque el aficionado al fútbol es "un público diferente".
Para enganchar a las personas que están más pendientes de Neymar o de Messi que del mensaje religioso hay grupos, como la Asamblea de Dios de Leblon, que reparte los típicos folletos con los horarios y fechas de todos los partidos customizados con mensajes religiosos. Su lema es "En este Mundial tu victoria está en Cristo", y junto con las tablas para marcar los resultados aparecen citas del Antiguo y Nuevo Testamento en portugués, inglés y español.
En Río de Janeiro, el principal punto de reunión de los seguidores es el FIFA Fan Fest, un recinto de ocio y pantallas gigantes en la playa de Copacabana que se ha convertido en el mejor lugar para "evangelizar". El padre Jose, de la Iglesia Baptista de Gávea, ya ha asistido en varias ocasiones: antes de los partidos entre España y Chile y entre Francia y Ecuador, y asegura que el Mundial es una oportunidad "bellísima" para divulgar el mensaje de Jesús.
LA FIFA, "INCOMPATIBLE" CON CRISTO
"La receptividad es muy buena, pocas personas rechazan el material que les entregamos", asegura el sacerdote, que comparte espacio en la calle con seguidores de otras iglesias: católicas, presbiterianas, protestantes, metodistas, pentecostales* Incluso hay musulmanes y Testigos de Jehová. "La verdad es que no hay competencia, a todos nos une hablar de Dios como salvador del mundo", remarca.
En un Mundial marcado por las sospechas de corrupción de la FIFA, el coste desmesurado de los estadios o el auge de la prostitución, las advertencias de estas agrupaciones religiosas no esquivan la crítica directa, porque entienden que evangelizar también es "denunciar lo que está mal", según De Lima. El padre Jose va más allá y carga contra la entidad organizadora del torneo, convertida en la bestia negra para muchos brasileños. En su opinión, su presidente, Joseph Blatter, y el resto de directivos necesitan cultivar su lado religioso.
"Si un uno de estos dirigentes reconoce a Cristo y entiende el mensaje del Evangelio su vida será transformada. Pero en ese caso esta persona tendría que salir de la FIFA, es algo incompatible. Cambiar una persona es una cosa, cambiar una institución entera es otra", ha zanjado.
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