El Ministerio Público entiende que el seleccionador masculino faltó a la verdad, pero que su versión no influirá en la sentencia
MADRID, 12 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía no pedirá que se investigue al seleccionador masculino Luis de la Fuente por falso testimonio en su declaración como testigo en el juicio a Luis Rubiales al considerar que sus aseveraciones no han sido lo suficientemente relevantes como para condenar o absolver al expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) o a los otros tres acusados.
Fuentes jurídicas han señalado a Europa Press que, a pesar de que De la Fuente faltó a la verdad en su testifical, su versión de los hechos relativos al beso de Rubiales a la futbolista Jennifer Hermoso y las presuntas coacciones posteriores no es influyente a la hora de dictar la sentencia.
Fue el pasado martes cuando De la Fuente declaró como testigo, negando que participase en el comité de crisis celebrado en la sede de la Federación días después del beso que su entonces presidente propinó a Hermoso. Si acudió a la sede el 23 de agosto fue, según apuntó, para preparar la lista de convocados de la Selección y no a participar en la reunión que ese mismo día se estaba celebrando para preparar el informe que estaba elaborando Integridad.
"Yo iba para tratar otros temas muy importantes, que eran los que a mí me competían, que creo que es bastante importante. Convocatoria, lista de jugadores, viajes, instalaciones, necesidades, etcétera, etcétera. Son reuniones muy duras, muy largas porque hay muchas cosas que hay que hacer", explicó.
La fiscal, Marta Durántez, le recordó durante su declaración que otros testigos le situaron en el mismo despacho y no en otro próximo, como él mismo sostuvo. De la Fuente matizó que únicamente acudió al despacho del presidente, donde se celebraba esa reunión, a comer "unos bocadillos" a la hora del almuerzo.
Su declaración se enmarca en la vista oral celebrada en la Audiencia Nacional y en la que Rubiales se enfrenta a 2 años y 6 meses de cárcel por los delitos de agresión sexual y coacciones.
También se sientan en el banquillo de los acusados el exdirector de la selección española, Albert Luque; el exseleccionador femenino, Jorge Vilda, y el exresponsable de Marketing de la RFEF, Rubén Rivera, para los que el Ministerio Público pide una condena de 1 año y 6 meses de cárcel por un delito de coacciones.