CRACOVIA 16 Ene. (Reuters/Ep) -
El cineasta Roman Polanski no cree que Polonia acceda a una solicitud para extraditarlo a Estados Unidos con relación a una condena por abuso de una menor en 1977.
Polanski, que se prepara para rodar una película en Polonia, fue interrogado el miércoles por los fiscales polacos encargados de la solicitud de extradición de Estados Unidos.
Los fiscales remitirán la solicitud a un tribunal que, si quiere continuar con su tramitación, hará llegar la solicitud al ministro de Justicia polaco para que tome la decisión final. Muchos polacos consideran a Polanski como una de las grandes figuras de la cultura nacional.
"Si la cuestión llega a la extradición, y no creo que vaya a ser el caso, tendría un problema, pero espero que no lleguemos a eso", dijo Polanski en una conferencia de prensa en el despacho de sus abogados en Cracovia, al sur de país.
Pasó la mayor parte de la conferencia de prensa hablando de la película que se está preparando para rodar en Polonia, sobre el caso Dreyfus, un escándalo político que sacudió Francia hace más de un siglo.
Polanski, de 81 años, es de origen polaco pero vive en Francia. Es reconocido internacionalmente por películas como Chinatown o El pianista.
CULPABLE DESDE 1977
El cineasta se declaró culpable en 1977 de haber mantenido relaciones sexuales con una adolescente de 13 años, Samantha Geimer, durante una sesión de fotos en Los Ángeles en la que abundaban el champán y las drogas.
Polanski pasó 42 días en la cárcel como parte de un acuerdo por 90 días para reducir los cargos. Huyó de Estados Unidos al año siguiente, por creer que el juez que llevaba el caso podría anular el acuerdo y enviarlo a la cárcel durante varios años.
En el 2009, las autoridades detuvieron a Polanski, cuya esposa Sharon Tate fue asesinada cuando estaba embarazada por seguidores de la secta de Charles Manson en 1969, en la ciudad suiza de Zúrich y quedó bajo arresto domiciliario por la orden judicial emitida por Estados Unidos.