SANTIAGO, 12 Jun. (Notimérica) -
Ester Huneeus Salas, conocida bajo el pseudónimo de Marcela Paz, falleció el 12 de junio de 1985. La escritora chilena destacó por sus ideas modernas y su concepción de la infancia. Sus obras más célebres las protagoniza Papelucho, un niño de ocho años cargado de ingenio e imaginación. Escribió artículos, poesías y cuentos, además de sus aclamadas novelas infantiles.
Paz nació en Santiago en 1902 en el seno de una familia acomodada. Al igual que sus siete hermanos, nunca fue al colegio, educándose en casa por profesores particulares. No relacionarse con otros niños la convirtió en una persona solitaria y tímida, sin embargo, fomentó su imaginación.
Estudió Bellas Artes en Santiago mientras realizaba diversos voluntariados en organizaciones benéficas. En contra de sus ideas de no casarse, contrajo matrimonio con José Luis Claro Montes y tuvo seis hijos.
Su vida estuvo unida a las artes, escribiendo y, además, realizando esculturas. Laboró en diversas revistas y diarios como El Peneca, La Nación o el Diario Ilustrado. Dirigió la Organización Nacional para el Libro Juvenil en su corresponsalía chilena durante tres años. Además, nunca descuidó ayudar a los más pobres mediante obras sociales.
Paz falleció a los 83 años en su casa de Santiago, después de una vida plena. Sus restos reposan en el Cementerio General de Santiago. Dada su importancia, en 1986 se creó el premio literario Marcela Paz.
Con #Papelucho en su doodle el sitio #Google recuerda 110 años del nacimiento de Marcela Paz. pic.twitter.com/3t7rdW44
PAPELUCHO Y SUS OBRAS DESCONOCIDAS
'Tiempo, papel y lápiz' fue su primera novela. Publicada en 1933, la firmó bajo el pseudónimo de Marcela Paz. No quería ser reconocida debido a su timidez, por lo que se basó en sus escritores favoritos para crear su nuevo nombre.
'Soy Colorina' apareció al año siguiente. Se configura como un conjunto de relatos del que sobresale 'Hojas de un diario'. La autora, tomando como base a una niña, habla del divorcio sin tapujos.
La fama le llegó a partir de 1947 con la creación de Papelucho. El niño de ocho años se convirtió en el protagonista de 12 libros, reeditados en más de 70 ocasiones. Su buen recibimiento se basó en su mirada sobre la infancia, sin menospreciar la capacidad de compresión de los menores. Sus historias son diversas, enfrentándose a múltiples situaciones como la de creerse huérfano, tener un hermano o ser disléxico.
Marcela Paz fue siempre aclamada por la crítica y recibió importantes galardones como el Premio Nacional de Literatura de Chile. El olvido del resto de sus libros corresponde, quizá, al encasillamiento que como mujer le proporcionó la literatura infantil. Sin embargo, los libros de Marcela Paz siguen siendo obligatorios en las escuelas, hablando de su moderna forma de encarar la vida.