CIUDAD DE MÉXICO, 8 Dic. (Notimérica) -
Este jueves se celebra el 130 aniversario del nacimiento de uno de los máximos exponentes del muralismo mexicano, Diego Rivera. Este artista nació en Guanajuato, el 8 de diciembre de 1886, y a los 10 años ya recibió su primera formación artística, aunque, como el mismo decía "el más remoto recuerdo de mi vida es que yo dibujaba".
A los 16 años se inscribió en la Escuela de Bellas Artes, pero fue expulsado de ella por participar en una protesta de estudiantes. Aunque le ofrecieron volver a ingresar, rechazó la oferta y se dedico al paisajismo por libre, lo que le haría merecedor de una beca para estudiar en España, otorgada por el gobernador de Veracruz.
En este país se empapó del impresionismo y se acercó a los movimientos anarquistas. Tras más de 13 años viajando por Europa, en los que vivió en Francia, Bélgica, Inglaterra e Italia, volvió a México. Durante sus años fuera del país, Rivera se formó en técnica y se hizo consciente de las múltiples posibilidades sociales de la cultura mural.
Tras su vuelta Rivera comenzó a reflejar en sus pinturas la cultura popular del país, así como las innovaciones que había traído la revolución. Plasmó fiestas populares, máscaras, los habituales tejidos coloridos mexicanos, indígenas y trabajadores.
La época de verdadero muralismo del autor comenzó en 1920, cuando se afilió al Sindicato de Trabajadores Técnicos, Pintores y Escultores y comenzó a pintar para diferentes edificios públicos y para el Gobierno, desde un sentimiento profundamente socialista que se dejaba entrever en todas sus obras.
Rivera estuvo casado en múltiples ocasiones, pero su relación más longeva e intensa la mantuvo con la también artista mexicana Frida Kahlo. El muralista consideraba que el hombre debía aceptar la superioridad y la dirección que marcasen las mujeres.
En 1930 volvió a dejar México, esta vez para exportar su arte a Estados Unidos, país donde realizó numerosas pinturas. Fue durante sus últimos años cuando creó sus obras más importantes, como son 'Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central', 'Canto general de Pablo Neruda' o 'El teatro de México'.
Diego Rivera falleció el 24 de noviembre de 1957 en Ciudad de México a los 71 años, tras pasar a la historia del arte como uno de los mejores representantes del muralismo mexicano.