CARACAS, 9 (EUROPA PRESS) -
La líder opositora María Corina Machado ha esbozado una "ruta para la liberación nacional" que pasa por la dimisión del presidente venezolano, Nicolás Maduro, y la celebración anticipada de elecciones, que en principio estaban previstas para 2019.
"Es la hora de cosechar los logros de esta gesta heroica", dijo la ex diputada de la Asamblea Nacional, en un acto celebrado en el municipio de Chacaíto, en el área metropolitana de Caracas, indicando que la salida a la crisis que vive el país "no está ni en la sumisión ni en la guerra", sino "en la democracia constitucional".
Para recoger esta "cosecha", Machado anunció "una ruta para la liberación nacional" que consta de tres pasos. El primero consiste en lograr un consenso amplio "de abajo hacia arriba, donde todas las expresiones sociales sean escuchadas, además de los partidos políticos y de los líderes que han dado su vida en esta lucha".
"Que se incorporen el movimiento estudiantil, las organizaciones gremiales, las asambleas de ciudadanos, los consejos comunales y los grupos culturales", indicó, en declaraciones recogidas por el diario venezolano 'El Universal'.
El segundo paso es "exigir la renuncia de Maduro en un gran clamor nacional". Machado consideró que los venezolanos no solo tienen el derecho, sino también el deber de pedir su dimisión "cuando quien dirige la nación lo que hace es destruirla". "Ni magnicidio ni golpe de Estado", aclaró.
Por último, abogó por celebrar elecciones anticipadas para "renovar el pacto social de los venezolanos" y renovar los poderes públicos. Para ello, explicó que la Carta Magna plantea dos opciones: una enmienda o una Asamblea Constituyente.
El alcalde de El Hatillo, David Smolansky, defendió que esta 'hoja de ruta' es la única alternativa, ya que "estamos ante políticos que quieren ver que esto caiga por su propia cuenta". "Pero hay otros que están dispuestos a dar la cara para el cambio", valoró.
Por su parte, el padre Leopoldo López, líder del partido político opositor Voluntad Popular (VP), advirtió de que habrá "sacrificios". "No se gana una independencia sin sacrificios, no se gana un 23 de enero sin muertos", dijo Leopoldo López Gil.
CRISIS VENEZOLANA
La crisis política en Venezuela estalló el pasado 12 de febrero, cuando arrancaron las protestas antigubernamentales y la represión de las mismas por parte de las fuerzas de seguridad y de civiles armados, que ya ha dejado 42 muertos, cerca de un millar de heridos y cientos de detenidos.
Desde entonces, opositores y oficialistas han marchado a diario para repudiar las acciones del contrario y llamar a un diálogo que aún no se ha producido porque la oposición exige antes la liberación de los detenidos, el desarme de los grupos pro gubernamentales y el fin de la represión.
La inestabilidad de Venezuela ha llevado a sus vecinos regionales a reunirse para buscar una solución. La Organización de Estados Americanos (OEA) se ha limitado a hacer un llamamiento al diálogo, a pesar de que Panamá había solicitado medidas efectivas, lo que ha llevó a Venezuela a romper las relaciones bilaterales.
La Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR) fue un paso más allá y, aunque expresó su respaldo al presidente venezolano, creó una comisión de ministros de Exteriores que ha conseguido sentar a la mesa de negociaciones a Gobierno y oposición.