MADRID, 10 Jul. (TRENDSmérica) -
Molly Bair es modelo, tiene 17 años y desde pequeña ha tenido que escuchar cómo la gente la llamaba "rata" o "duende". Su belleza no es común. No lo es, al menos, si observamos la imagen habitual de las modelos que aparecen en desfiles de moda o protagonizan sesiones de fotos.
Sin embargo, su imagen singular no ha impedido que la joven estadounidense haya conquistado las pasarelas y se haya ganado un hueco entre las modelos de las grandes firmas de moda. Su carrera comenzó hace apenas un año y Molly Bair ya ha desfilado para Dior, Prada, Chanel, Proenza Schouler o Balenciaga.
Bair, que se define a sí misma como "algo malvada y algo graciosa", fue descubierta en julio del año pasado por un agente de The Society Management, mientras paseaba por un mercadillo de Nueva York. En cuestión de pocos meses, la joven ya había pisado su primera pasarela.
La modelo ha desfilado, en menos de un año, en algunos de los desfiles más importantes del mundo, entre los que se encuentran Milan, Paris o Nueva York, y ha aparecido en publicaciones como 'Vogue Italia', 'W Magazine' y en una campaña para la marca 'Coach'.
Bair desfiló para Chanel vestida de novia, una experiencia que define como "increíble", a pesar de reconocer que tuvo cierta dificultad: "quien me conoce, sabe que me cuesta estar elegante durante más de 30 segundos".
Entre todas las firmas para las que Molly ha desfilado, reconoce que si tiene que elegir se quedaría con Prada: "fue uno de mis favoritos porque la colección y el set eran alucinantes" y añade que también se queda con Wang, Chanel, Proenza, y Giles. Además, reconoce sentir un gran respeto por las modelos Julia Nobis y Saskia de Brauw.
"Jamás habría pensado que una chica que pasó la mayor parte de su infancia siendo uniceja, llevando gafas y una camiseta de Yoda estaría en Vogue Italia", decía Molly en una entrevista para CNN. La modelo piensa que las cualidades por las que le pusieron sus apodos son las que le han servido, finalmente, para marcar la diferencia con un encanto codiciado por la industria de la moda.
Molly Bair forma ya parte de ese grupo de modelos con una 'belleza diferente' que rompe con los cánones establecidos hasta ahora, lista a la que también pertencen Winnie Harlow, Masha Tyelna, Candice Huffine o Tara Lynn. "Creo que la belleza realmente viene de la singularidad", dice Bair y asegura que ser modelo le ha hecho abrir los ojos sobre lo que significa la belleza en general. "La belleza es tener confianza en lo que eres y lo que pareces", afirma.
La modelo se ha convertido en un fenómeno y no solo para los diseñadores de las grandes firmas. Molly está ganando popularidad en internet y su cuenta de Instagram, donde comparte sus experiencias como modelo, cuenta ya con más 50.000 seguidores.
