MONTEVIDEO, 19 Jun. (Notimérica) -
Iberoamérica recuerda este domingo 19 de junio el nacimiento de José Gervasio Artigas, un militar rioplatense que jugó un papel decisivo en la Revolución del Río de la Plata, una crisis en el Imperio Español, que puso en jaque su dominio colonial.
Nacido el 19 de junio de 1764 en el territorio de Montevideo (Uruguay), la figura de Artigas es recordada en Uruguay y Argentina, donde recibió los títulos de 'Jefe de los Orientales' y 'Protector de los Pueblos Libres'.
El militar formó parte del Ejército Artiguista, que colaboró en las luchas independentistas contra el Imperio español y el Reino Unido de Portugal, Brasil y Algarve, para combatir las unidades que estaban situadas en Buenos Aires y Montevideo.
Sus luchas se concentraron además en la conformación de la Liga Federal, también conocida como la Liga de los Pueblos Libres o Unión de los Pueblos Libres, una confederación de provincias aliadas dentro de las Provincias Unidas del Río de la Plata.
Liderada por el propio Artigas, la Liga Federal supuso una férrea defensa de la autonomía federal de las provincias, contribuyendo de manera indirecta a la independencia de los territorios situados en el conjunto de provincias.
La Provincia Oriental se terminaría independizando de España en 1815. Más tarde, en 1828, al concluir la Guerra del Brasil, una gran parte de la provincia se convirtió en un Estado autónomo separado del resto y luego independiente.
Cuando nació el Estado Oriental de Uruguay, Artigas ya se encontraba en su largo exilio en Paraguay --donde murió en el año 1850, en la actual Asunción-- por lo que jamás consideró a la Banda Oriental como un país independiente y nunca la llamó Uruguay.
Su lucha en varios países le convirtió en uno de los personajes más queridos en Iberoamérica, un hecho que ha quedado reflejado en la gran cantidad de calles, estatuas y escuelas que están repartidas por toda la región bajo su nombre.
Los retos de Artiga fueron trasladados desde Paraguay a Montevideo, donde descansan desde entonces. En 1950, con motivo del centenario de su muerte, se colocó una urna en un altar ubicado en el Obelisco de Montevideo para ser exhibida, aunque desde entonces, han cambiado con frecuencia de ubicación.
SU LEGADO
La raíces de su ideología proceden, en gran medida, de dos libros que leyó siendo un adolescente: 'Sentido común' de Thomas Paine y 'El contrato social' de Rousseau, así como de otros autores procedentes de la Ilustración.
No obstante, aquello que marcó más a Artigas a nivel político e ideológico fue su relación con los indígenas, negros y gauchos. Convirtiéndole en un militar con una estrecha relación con la alta sociedad de Montevideo, pero también con los grupos más marginados.
El ideario artiguista quedó reflejado en las Instrucciones del año XIII y en la conformación de la Liga Federal, así como en el Reglamento de Tierras otras publicaciones de carácter socioeconómico.