MÉXICO DF, 29 Oct. (Notimérica) -
Joaquín Guzmán Loera, alias 'El Chapo', no está solo. Los 5.000 hombres que forman su Ejército lo protegen y están dispuesto a defenderlo hasta la muerte. Todos ellos forman parte de 'Gente nueva', una organización criminal encargada de proteger al famoso narcotraficante. Sus miembros, entrenados para matar de forma cruel, decidieron unirse al bando del narcotráficante tras servir durante algún tiempo al Ejército o la Policía Federal mexicana.
Tienen entre 20 y 30 años y renunciaron a sus puestos en las fuerzas de seguridad mexicanas para unirse a un grupo criminal aliado del cártel que dirige 'El Chapo', el de Sinaloa. Una vez que se integraron en las filas de la banda que se encarga de la protección del hombre más buscado de América, estos soldados recibieron entrenamiento en Veracruz o Chihuahua para que aprendan a decapitar, hacer desaparecer y torturar a quien se les ordene.
Se trata de una organización con la que se alió 'El Chapo' en 2007 y que, según el Departamento Antidroga estadounidense (DEA, por sus siglas en inglés) son extremadamente leales al líder del cártel de Sinaloa. Además de protegerle, tienen por misión defender los intereses de la organización, lo que implica enfrentarse en cruentas guerras a otras organizaciones dedicadas al narcotráfico.
No solo su estructura se asemeja a la de un cuerpo militar, sino que los miembros de este grupo usan vestimenta de soldados y portan armas de alto calibre que están dispuestos a usar en cualquier momento.
Aunque sus rostros los cubren con pasamontañas, no tienen el más mínimo pudor en mostrar a qué organización pertenecen. De hecho, sus camionetas son fácilmente reconocibles, suelen ser blindadas, sin matrículas y en sus ventanas pegan cinta adhesiva formando la letra x.
'El flaco', el fundador de 'Gente Nueva', es un viejo conocido de 'El Chapo'. Se inició en 1995 en el mundo del crimen bajo la protección del famoso narcotraficante hasta erigir posteriormente esta organización.
Sin embargo, la trayectoria de este líder criminal se truncó en 2011 cuando fue detenido por el Gobierno Federal en Culiacán (Sinaloa), dejando a la organización sin un claro dirigente hasta la fecha.