CIUDAD DE MÉXICO, 26 Abr. (Notimérica) -
Debido al actual ritmo de consumo, en los próximos años muchas de las mayores ciudades de todo el mundo podrían sufrir escasez y restricciones en el uso del agua corriente.
Por el momento, países como Sudáfrica ya han comenzado a imponer restricciones a sus ciudadanos, limitando el consumo a 50 litros de agua por persona y día en algunas zonas, bajo la amenaza de multas de hasta 850 dólares. Cabe resaltar que, el gasto de agua que produce, por ejemplo, poner una lavadora asciende ya a unos 70 litros.
Como consecuencia del aumento de la población y de los efectos del cambio climático, se estima que para el año 2050 el consumo mundial de agua dulce se haya incrementado en hasta un 40 por ciento, algo que sólo hará que la situación se agrave.
Esta crisis en la disponibilidad de agua corriente podría afectar a muchas de las grandes ciudades del planeta y, entre ellas, a Ciudad de México, donde la situación actualmente ya dista mucho de ser perfecta.
Ahora mismo, en la capital mexicana, una de cada cinco personas sólo disponen de agua del grifo durante unas horas al día, según la revista 'Forbes'. Además, Ciudad de México está obligada a importar casi el 40 por ciento del agua que consume debido, en parte, a un deficiente sistema de reciclaje del agua desperdiciada y a la pérdida de agua en un sistema de tuberías que se estima pierde el 40 por ciento del agua que circula por él.
En la escasez de agua inciden también de forma muy importante, y no sólo en Ciudad de México sino también en otras zonas del país como Benito Juárez, Cuauhtémoc o Azcapotzalco, las altas temperaturas y la escasez de precipitaciones.
SOLUCIONES
El director general del Sistema de Aguas de Ciudad de México (Sacmex), Ramón Aguirre, se pronunció hace unos días acerca del problema que sufre la capital y la necesidad de llevar a cabo grandes reformas, según recoge el portal 'Construcción Latinoamericana'.
Durante su participación en el foro Agua Capital, Aguirre señaló que "se requiere cambiar el 70 por ciento de la infraestructura hídrica de la ciudad", algo que exigiría una inversión de 300 millones de dólares al año --actualmente se invierten poco más de 80 millones-- durante 50 años, es decir, un total de unos 15.000 millones de dólares.
Además, el presidente de Sacmex explicó que dentro de esa inversión se ha considerado la necesidad de construir 22 nuevas plantas potabilizadoras que se sumen a las 53 ya existentes.