MADRID, 21 Jul. (Notimérica/EP) -
Desde la antigüedad el ser humano ha realizado auténticas proezas en la construcción de grandes estructuras tanto a nivel arquitectónico como a nivel artístico. Y todas estas por su uso cotidiano principal o bien como zona turística, tienen una determinada utilidad. Sin embargo, también se pueden observar lugares que quedaron aislados, sin ser reclamados por nadie, como una obra propia de la naturaleza. Aquí una muestra de algunos de los sitios más increíbles que han sido abandonados.
En primer lugar, el sitio más increíble que el hombre ha dejado a la intemperie, y cómo este ha pasado a formar parte del paisaje, encontramos el famoso 'Túnel del amor' ucraniano. En un principio ideado para transportar materiales al pequeño pueblo de Kevlan. Luego pasó a formar parte de una tradición turística para enamorados como el famoso sendero del amor (Via dell `Amore) italiano en Cinque Terre.
La segunda está la ciudad de Craco, en Italia, de carácter medieval, esta tierra data su origen prerrománico entre los siglos VIII y VI a.C. En 1963, debido a un movimiento sísmico, parte de la ciudad se derrumbó, lo que supuso que su población migrara progresivamente hasta que en 1975 quedase completamente vacía.
En tercera posición, esta vez con un paisaje propio, la que en su día fue la sede del partido socialista búlgaro, el mayor símbolo representativo al partido. Creado en 1981 para conmemorar la fundación del partido de los socialistas, fue abandonado tras la caída de estos.
Otro monumento a la ostentación que ocupa el cuarto lugar es el teatro Lawndale de Chicago (Estados Unidos). Inaugurado en 1927, con 2.200 butacas, la obra del arquitecto William P. Whitney se asemejaba más a una catedral que a un teatro. En 1.963 cerró sus puertas y aparte de ser una obra de arte "en descomposición", actualmente se le da uso como almacén para muebles de hotel.
En quinto y último lugar, un ejemplo de abandono progresivo fue la estación central de Michigan en Detroit (Estados Unidos), construida sobre la base del antiguo deposito municipal que se incendió. Los arquitectos Warren & Wetmore se encargaron de un proyecto que en principio se ideó, además de la estación, como una zona comercial con sus 18 alturas.
Sin embargo, se le acabó dando uso como despachos. La falta de demanda hizo que incluso quedase a medio acabar. Se creó en las afueras para crear una expansión de la ciudad, sin embargo su difícil acceso hizo que quedara en desuso. El deterioro de las instalaciones la ha dejado finalmente abandonada en manos del vandalismo.
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