MADRID, 18 Mar. (Notimérica - María Fernández Sánchez) -
Las heridas de las protestas que sacudieron Venezuela en 2014 y que dejaron 43 muertos y cientos de heridos, siguen sangrantes. La oposición venezolana, después de ver las medidas judiciales en contra de algunos de sus líderes acusados de instigar a la violencia, ganó las elecciones parlamentarias de diciembre, una victoria que le ha llevado a impulsar una ley de amnistía para liberar a los encarcelados.
El caso del líder opositor Leopoldo López, condenado a 13 años y 9 meses de prisión, ha dado la vuelta al mundo y su causa ha sido respaldada por expresidentes y líderes políticos internacionales que le creen inocente. Sin embargo, las víctimas y los familiares de las víctimas que sufrieron las protestas creen que pocos han escuchado sus voces y que los opositores procesados por la justicia venezolana "no son presos políticos, sino delincuentes que llevaron la mortandad a Venezuela".
Representantes del Comité de las Víctimas de la Guarimba --protestas con barricadas o bloqueos de vías-- han acudido a Madrid para desmentir que las víctimas de las protestas hayan sido manifestantes, tal y como ha difundido la oposición, y para denunciar la Ley de Amnistía impulsada por la Mesa de Unidad Democrática (MUD), que consideran una amenaza para los derechos de las víctimas "y está pensada únicamente para que los delitos cometidos por los opositores queden en la impunidad".
Los portavoces del comité Óscar Carrero y Desiree Cabrera, que han concedido una entrevista a Notimérica, vienen de sostener encuentros en la ONU, en Ginebra, y en España se han reunido con diputados de la Comisión de Exteriores, con concejales de Ahora Madrid, con miembros de Izquierda Unida y con la Defensa del Pueblo. También han intentado reunirse con la portavoz del Grupo Popular en el Ayuntamiento de Madrid, Esperanza Aguirre, pero la cita no ha sido confirmada.
N: ¿Cuál es su cometido como ONG?
D: Nuestra asociación es un grupo de familiares de víctimas y víctimas directas de los hechos de Violencia política ocurridos en Venezuela en 2013 y 2014. En esos años hubo dirigentes de la oposición que hicieron el llamado a la manifestación, a salir las calles mediante un plan denominado 'La Salida' que llamaba a los estudiantes a salir a las calles mediante mecanismos no pacíficos para lograr la salida del presidente de la República.
En esos hechos de violencia ocurridos en 2013 once personas perdieron la vida y hubo centenares de lesionados. En el año 2014 fallecieron 43 personas y hay más de 800 lesionados. Entre estos lo que ha trascendido a nivel internacional es que los fallecidos fueron 43 estudiantes que participaban pacíficamente y que fueron asesinados por los militares. Hemos tomado la tarea de demostrarle al mundo cual es la verdad, quienes son las víctimas.
N: ¿Quiénes son las víctimas de estos hechos violentos que tuvieron lugar en Venezuela?
D: De las 43 personas fallecidas seis fueron militares y tres fueron policías nacionales. Murió un fiscal del Ministerio Público cuando se dirigía a constatar el estado de salud de una muchacha que fue herida en esas protestas, que se impactó con una barricada, perdió el control y chocó contra un árbol y perdió la vida al instante. También una maestra chilena, Gisela Rubilar, que salió a despejar las calles porque ya eran constantes las quemas y las barricadas y recibió un disparo en la cara y falleció. Fueron personas ajenas a las protestas. No fueron estudiantes pacíficos. Fueron manifestantes que colocaban trampas en las vías, alambres galvanizados para que los motoristas se mataran... Secuestraban a las personas en sus urbanizaciones y no les permitían la salida, y así fallecieron las personas que no pudieron llegar a sus centros de salud.
Únicamente ocho de las víctimas murieron por el excesivo uso de la fuerza por parte de las autoridades y las personas responsables de estas muertes están siendo procesadas.
N: ¿Por qué forma parte usted de la asociación?
D: Yo soy madre de una niña que asistía a una casa-cuna, un organismo público donde trabajo. El 1 de abril de 2014 los manifestantes la atacaron y provocaron un incendio. Pusieron en peligro la vida de 89 bebés entre 6 meses y 3 años. Afortunadamente pudimos desalojaros de emergencia y con la ayuda de la Guardia Nacional, que impuso orden para que pudieran entrar los bomberos y apagaran el fuego. Todo ocurrió bajo la mirada del alcalde de Chacao (Ramón Muchacho), que es de Primero Justicia, un partido opositor.
Quemaron unidades de transporte con gente adentro, camiones llenos de gasolina. Eso lo puedes ver en las redes sociales, es una prueba de demostración que hacían ellos mismos para hacer ver que estaban equipados con armas largas, con bazocas, con morteros, con sustancias como C4 para hacer explosivos...
N: Según usted, ¿qué intereses tenían estas personas en provocar la violencia?
D: Eran personas que estaban apoyadas y financiadas para cometer estos actos de violencia porque comprar un mortero es costosísimo, y por la manera indiscriminada en la que ellos utilizaron este tipo de artefactos tuvieron que tener financiación.
N: ¿Cuál es su opinión sobre la Ley de Amnistía que quiere aprobar la oposición?
D: La gente sabe quien es Leopoldo López por toda la campaña mediática que se ha hecho, pero si preguntas por Elvis Durán nadie sabe quién es. Elvis Durán fue el muchacho que impactó contra un acero galvanizado y murió degollado. Estas personas que vienen a hablar a España de la ley de amnistía no hablan de las víctimas. En un primer momento hablaban de los supuestos 43 estudiantes pacíficos que murieron por el uso excesivo de las Fuerzas de Seguridad, pero ahora ya no los escuchas hablando más de ellos y sólo hablan de liberar a los presos políticos que ellos llaman 'de conciencia', pero que son personas que estaban en los campamentos que desmantelaron.
N: Oscar, usted es víctima directa de las protestas violentas en Venezuela...
O: Soy de San Cristóbal del estado de Táchira, un estado fronterizo con Colombia, donde en 2014 ocurrieron hechos violentos por un grupo de señores que llamaron a 'La Salida', donde el alcalde era Daniel Ceballos, que se encapuchó y salió a las calles también a llamar a la violencia, a llamar al desastre.
En San Cristóbal destruyeron los sitios públicos, se metieron contra un hospital de niños especiales, no dejaban circular a las ambulancias...Yo fui a buscar unos camiones de medicina que no dejaban pasar y, buscando vías alternativas, me hicieron voltear el camión y como pude me salí por la ventanita. Venía un grupo de encapuchados tirando piedras, bombas molotov y yo les gritaba que llevaba medicinas, que no le fueran a meter candela al camión. Ni caso me hicieron. Para protegerme puse la manita y la perdí automáticamente. Me debatí entre la vida y la muerte en el hospital durante cinco días. Mi hijo me decía que yo era un guerrero, un luchador, que tenía que seguir luchando, que no me dejara vencer y el médico me dijo que había perdido la mano derecha. Ese día sentí que más vale que me dijesen que había muerto porque ese día me cambió la vida con mis hijos, con mi trabajo. Yo soy operador de maquinaria pesada y me gustaba hacer deporte, jugar al béisbol y al futbolito con mis hijos los fines de semana. Yo he tenido a mis hijos sólo durante 10 años, he sido papá y mamá a la vez. Cuando salí del hospital, fui directo a formar el Comité de Víctimas y ahora soy vocero del estado de Táchira.
Ellos (la oposición) dicen que en Venezuela el Gobierno viola los Derechos Humanos, pero ellos son los que nos violaron los derechos a nosotros. Los presos políticos, no son presos políticos, son delincuentes que llevaron a la mortandad a Venezuela. Quieren sacar una Ley de Amnistía, de olvido para sus delitos, porque en la Asamblea Nacional hay más de un diputado que está involucrado en la llamada a 'La Salida'.
N: ¿Qué piensan del apoyo que le ha brindado a Leopoldo López el Gobierno de España y la Comunidad de Madrid?
D: Nos preocupan este tipo de pronunciamientos porque cada vez que se pronuncian a favor de Leopoldo López entorpecen los procedimientos y las investigaciones de todos los casos que nosotros estamos llevando a cabo en Venezuela. Es un doble rasero, porque hablan de las víctimas de los Derechos Humanos, pero no escuchan a todas las víctimas.