CIUDAD DE MÉXICO, 12 Jul. (Notimérica) -
El presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador, promoverá en su nuevo gobierno el derecho a que todos los pacientes terminales mexicanos tengan la legitimidad a una muerte digna. La propuesta es la de aplicar en todo el país la Ley de Voluntad Anticipada, que ya existe en 11 Estados.
Los principales objetivos de esta ley son el de crear un formato homologado para todos los Estados y un registro nacional para que las voluntades se reconozcan sin distinciones. Entre otros aspectos, la ley regulará la decisión de las personas a ser sometidas o no a tratamientos que puedan alargar su vida durante la fase terminal, en la que ya no puedan sobrevivir de manera natural.
"La vida digna contiene implícitamente el derecho a una muerte digna" recoge la Carta Magna desde que se consagrase en la Constitución de la Ciudad de México el derecho a la muerte digna. Un texto que, al igual que esta Ley, ha provocado confusión y rechazo entre algunos ciudadanos al considerarla un acercamiento a la eutanasia, que es una práctica castigada en el país con hasta 12 años de cárcel y con la que no abogan los sectores más religiosos. Sin embargo, según los datos recogidos por la Asociación Derecho a Morir Dignamente (DMD) siete de cada diez encuestados ven necesario un cambio en la constitución para que los pacientes enfermos puedan acabar con su vida si lo desean.