CIUDAD DE MÉXICO 18 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Comisión del Caso Iguala-Ayotzinapa en el Congreso de Guerrero, el diputado Ricardo Mejía Berdeja, ha solicitado que se extienda la búsqueda de los restos de los 43 estudiantes 'normalistas' desaparecidos hace más de dos años más allá de los terrenos actuales, hasta cubrir todos los territorios en los que opera el cártel Guerreros Unidos.
Mejía Berdeja se ha reunido este lunes con el subprocurador de Derechos Humanos de la Procuraduría General de la República (PGR), Eber Omar Betanzos Torres, para recibir información sobre el avance de las investigaciones, encuentro en el que le ha solicitado que el territorio se amplíe a otros municipios más allá de Iguala, Cocula y Huitzuco.
En particular, ha pedido que se busque también en otros municipios como Eduardo Neri, donde se conoce que existe actividad por parte del cártel, al que las autoridades señalan como grupo implicado en la desaparición de los estudiantes.
"Este grupo de Guerreros Unidos que participó en la desaparición forzada con las policías municipales tiene presencia en varios municipios y nos interesa ver no solamente la posibilidad de que pudieron llevarlos a Cocula sino a Eduardo Neri y no descartar ningún municipio de la región", ha señalado el diputado, según declaraciones recogidas por el diario 'Informador'.
CASO IGUALA
Los 'normalistas' llegaron a Iguala el 26 de septiembre de 2014 para recaudar fondos para viajar a la capital mexicana el 2 de octubre con el fin de participar en la conmemoración de otra matanza estudiantil, la de Tlatelolco.
Según la versión oficial, ese día la esposa del alcalde tenía previsto presentar un informe de su labor al frente del Sistema de Desarrollo Integral para la Familia municipal y, ante el temor de que los estudiantes reventaran el acto, como ya había ocurrido en el pasado, el alcalde ordenó a la Policía actuar contra los 'normalistas'.
Policías de Iguala, apoyados por agentes de Cocula, interceptaron a los jóvenes a la entrada del municipio y abrieron fuego, matando a uno de ellos y dando lugar a un enfrentamiento que se saldó con seis muertos y 25 heridos.
Una vez controlada la situación, detuvieron a los 'normalistas' que no consiguieron huir, les condujeron en varios furgones policiales a los límites entre Iguala y Cocula y se los entregaron al grupo de sicarios de Guerreros Unidos. A partir de ese momento se pierde el rastro de los 43 'normalistas'.