MADRID, 27 Nov. (Notimérica) -
No todos los grandes pintores de la historia son europeos como Miguel Ángel, Van Gogh, Boticelli o Velázquez. El siglo XX iberoamericano ha supuesto un rupturismo y una revitalización del continente, dando grandes artistas que pasarán a la historia también en el terreno de la pintura.
La identidad nacional es el sello recurrente de los artistas iberoamericanos, capaces de llegar a lo más alto en el mundo de las artes plásticas sin perder su tradición. Esta característica propia, asociada a las vanguardias artísticas que venían de Europa, como el surrealismo o el cubismo, convierten el arte iberoamericano en un mestizaje único entre lo propio y lo importado.
'Notimérica' te trae los 10 pintores iberoamericanos imprescindibles del siglo XX, responsables del gran desarrollo artístico de la región en los últimos 100 años.
FERNANDO BOTERO
El colombiano Fernando Botero es probablemente el artística iberoamericano vivo más cotizado del momento. Su obra, característica por presentar figuras humanas distorsionadas a través de una gordura extrema, se ha convertido en un clásico de la pintura, llegando a conocerse su estilo como "boterismo". Ha hecho incursiones en la escultura, con el mismo estilo de líneas curvas y figuras redondeadas.
DIEGO RIVERA
El mexicano Diego Rivera es uno de los muralistas más famosos del mundo. En su obra asimila tendencias de las vanguardias europeas mezcladas de forma magistral con la tradición mexicana. Representa en muchas de sus obras un pasado grandioso del México prehispánico, época en la que el mural era una práctica constante. Diego Rivera también es el padre de la actual catrina.
FRIDA KAHLO
La famosa artista mexicana Frida Kahlo ha pasado a la historia por haber creado una pintura absolutamente personal, diferente a todo lo que se estaba haciendo en el México del siglo XX. Su obra se encuentra marcada por un fuerte autobiografismo, siendo famosos muchos de sus autorretratos. De forma ingenua, metafórica y plagada de color, Kahlo consigue contar una historia en cada cuadro
ROBERTO MATTA
Este artista chileno es un pintor eminentemente surrealista que en la mayor parte de sus obras se deja llevar por un automatismo, una especie de dadaísmo pictórico muy característico. Matta es el creador de una obra irracional, en la que a través de juegos con el color y las formas, realiza una crítica a la sociedad que le era coetánea. Una obra irracional para reflejar una sociedad irracional.
WILFREDO LAM
Wilfredo Lam, de origen africano pero criado en Cuba, en uno de los pintores que mejor han fundido el cubismo y el surrealismo, ambas vanguardias provenientes de Europa, con el estilo caribeño propio de su tierra.
ANTONIO BERNI
Este pintor, grabador y muralista argentino desarrolla una obra profundamente enraizada en la crítica social y política. A través de un gran realismo y de colores muy vivos, Berni retrata los sectores más vulnerables de la sociedad. Durante su carrera, experimentó con múltiples técnicas y soportes.
LEONOR FINI
Leonor Fini, de origen argentino, es una de las mayores impulsoras del surrealismo. Su obra pasa por dos etapas claramente diferenciada: durante la primera mitad de su carrera se caracterizó por el uso de colores brillantes, para dejar paso a la oscuridad y la crudeza del final de su carrera, con cuadros que evocan a la baja Edad Media.
JOSÉ GURVICH
Este artista uruguayo es una de las figuras fundamentales del universalismo constructivo, movimiento que trata de representar al ser humano en concordancia con el universo, así como internarse en los aspectos más metafísicos del hombre. Jorge Gurvich ha significado la unificación del arte y la cultura de su país.
BENITO QUINQUELA MARTÍN
Pintor y muralista de origen argentino que retrató sobre todo motivos portuarios, como barcos y puertos, debido a lo que es denominado "el pintor del riachuelo". Las creaciones de Benito Quinquela Martín pretenden representar la actividad y la rudeza de la vida diaria en un puerto.
LUIS FELIPE NOÉ
Este pintor argentino es un representante fundamental del neoexpresionismo, un movimiento pictórico basado en el expresionismo alemán y que surge como contrapunto del minimalismo. Las obras de Luis Felipe Noé están cargadas hasta más no poder de figuras minúsculas de colores brillantes.